2018年1月20日 星期六

阿根廷教會每日靈修 - Devocional del Dia 20.01.2018



你是我的愛子、我喜悅你

路加福音第三章21~38節

 

在馬太福音中所記載的耶穌的家譜,是從亞伯拉罕開始,其中特別提到大衛,這是為了讓猶太人能明白耶穌是亞伯拉罕的子孫,是大衛的後裔。因為從家譜来看,約瑟和馬利亞都是大衛的後代,足以承受上帝給大衛的應許,就是他的后裔必坐在寶座上,成為猶太人的王。

在路加福音中記載的家譜是從耶穌開始,一直追溯到大衛,亞伯拉罕,最後一直到亞當,亞當是上帝的兒子。所以耶穌依人看來,是約瑟的兒子,是亞當的後裔。同時在耶穌受洗後,有聲音從天上來,說祂是上帝的愛子,所以耶穌是人子,又是神子,所以唯有祂可以成為上帝與人之間的中保,也唯有祂有資格成為全人類的救主。

約翰福音 1:12 說 "凡接待他的,就是信他名的人,他就賜他們權柄作上帝的兒女。" 所以當我們接受耶穌為我們生命的救主時,我們就成為上帝的兒女,而當我們說某人是某某人的兒子女兒,通常所意味的是這位某某人所代表的名聲及家族,成為上帝兒女的我們是否有耶穌的生命彰顯在我們的生命中?

衆百姓受了洗,耶穌也受了洗,祂貴為神子,本不用接受悔改的洗,但祂卻與罪人認同,謙卑來受洗,因為祂要以人子的身份來為人死,使人得著拯救。唯有這樣,才有法定的資格使祂能站在人的位置上來悔改,以代替人的罪。

耶穌的順服和謙卑討天父的喜悅,因此天就為祂打開,聖靈降臨在其身上,這是我們服事該有的態度,當我們謙卑並順服的去做天父所吩咐的事,天會為我們打開,上帝的靈會在我們身上,使我們能靠著聖靈大有能力地服事。

若我們整個的人生,能被上帝稱我們為祂所喜悅的愛子,就是我們生命中最大的榮耀。


陳光晴長老
 

 

Tu eres mi Hijo amado, en ti tengo complacencia

Lucas 3:21~38

La genealogía de Jesús en el Evangelio de Mateo, comienza con Abraham y hace especial énfasis en David. Esto es para que los judíos puedan saber que Jesús es descendiente de Abraham y David. Esta visión genealógica pone a Jesús como heredero de la promesa de la familia real de David, quien reinará al pueblo judío.

En la genealogía del Evangelio de Lucas, comienza con Jesús, y asciende a David, Abraham y finaliza con Adán, quien es hijo de Dios. Desde esta cosmovisión humana, Jesús es hijo de José y descendiente de Adán. Pero su bautismo, una voz clamó: “Tú eres mi Hijo amado…”, por lo tanto, Jesús es hijo del hombre, a la vez Hijo de Dios, es el único mediador, quien puede ser el salvador de todos los seres humanos.

Juan 1:12 dice: “Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios”. Cuando recibimos a Jesús como nuestro Salvador, somos hijos de Dios. Muchas veces cuando decimos tal persona es hijo o hija de tal, nos referimos a que es hijo o hija de una familia reconocida, y nosotros que somos hijos de Dios, ¿hemos de manifestar la vida de Jesús en nuestras vidas?

Jesús fue bautizado al igual que muchos, siendo Hijo, no tenía necesidad de hacerlo, pero lo hace para reconocerse con los pecadores, y morir como hijo del hombre, para salvarlos. Solo de esta manera, puede tener autoridad para perdonar y cargar los pecados de los seres humanos.

La obediencia y la humildad de Jesús ha agradado al Padre Celestial, y el Espíritu Santo descendió en El. Esta debe ser la actitud que debemos tener en nuestros ministerios. Cuando estamos dispuestos a obedecer humildemente los que Dios nos encomendó, Dios abrirá el cielo por nosotros, y su Espíritu estará en nuestra vida y podemos obrar con poder.

¡No hay mayor gloria que de ser elogiado por Dios en que somos sus hijos amados!

Presb. Daniel Chen