火窖
但以理書第三，四章
尼布甲尼撒是那些諸多著迷不悟，一而再再而三干犯 神的王之一。他自我膨脹到一個地步，竟然為自己立了一座純金的人像，好讓別人敬拜他。而這裡，則是測驗經文裡這些英雄信實的時候了。他們本可以下跪，因為內心清楚這金像並不是神，但他們並沒有這麼做，而是決定誠實的面對 神，不被內心的恐懼所控制。正因他們信靠了神， 神也以信實對待他們。
其實這是一個陷阱，原本對他們三人指控就是不公正的。但他們並沒有用有效的話語來為自己辯護，也沒有想辦法讓自己不難堪。他們清楚的知道為他們撐腰並與他們同在的是 神。最後，這三人決定獻上自己的性命——被扔進火窖中。他們這麼做並不是因為他們相信 神會拯救他們，而是因為深信為 神獻上生命是值得的。並不是要見證神跡，而是想以信實待 神。
正因他們以信實待 神，神行了神跡，一個所有人——就連尼布甲尼撒王本人都見證了的神跡。這三人如此行的原因並不是要招人眼目，但卻被所有人注意到；他們並不是要求神跡，但 神行了神跡；他們並不是為了自己的榮耀，但 神卻高舉了他們。當我們單單因為愛 神而服侍 神時， 神就會以祂的方式展現祂的愛。要愛 神，並以你的行動活出來。
Flavio Calvo 牧師
El horno de fuego
Daniel 3~4
Nabucodonosor era uno de esos reyes que no aprendía nunca, una y otra vez volvía al pecado de ponerse en contra de Dios y querer ensalzarse a sí mismo. Fue tan grande su vanidad que hizo una estatua de sí mismo, enorme, de oro puro, para ser adorada. Ahí es donde se pone en juego la fidelidad de los héroes de esta historia. Ellos podrían haberse arrodillado, aún creyendo dentro de sí que esa estatua no era un dios. Pero decidieron ser fieles a Dios, decidieron no negarlo, ni dejarse llevar por el miedo. Y como fueron fieles a Dios, Dios fue fiel con ellos.
Era una trampa, la acusación hacia ellos era injusta, pero ellos no pensaron en palabras eficaces para defenderse, ni planearon una protección, ni buscaron quedar bien de ninguna manera. Ellos tenían en claro que su defensa, que su respaldo, y que quien los acompañaba era Dios, Y ellos decidieron dar su vida, iban a ser lanzados al horno de fuego. Ellos no hicieron esto con la fe de que Dios los salvaría, lo hicieron con la convicción de que Dios merece que den su vida por él. No para ver el milagro, sino para ser fieles a Dios.
Pero como quisieron ser fieles a Dios, Dios les dio el milagro, y ese milagro fue evidente a todos, hasta al mismo rey Nabucodonosor. No hicieron esto para ser vistos, pero fueron vistos por todos. No lo hicieron por el milagro, pero Dios les dio el milagro, no lo hicieron por gloria personal, pero Dios los levantó. Cuando hacemos cosas para Dios, solo por el amor hacia él Dios demuestra su amor a nosotros como él quiere. Amalo, y mostrálo con tus actos
Pr. Flavio Calvo
