權威主義vs.愛的服侍
馬可福音第十章32～52節
耶穌叫他們來，對他們說：你們知道，外邦人有尊為君王的，治理他們，有大臣操權管束他們。只是在你們中間，不是這樣。你們中間，誰願為大，就必作你們的用人”《馬可福音10:42-43》
閱讀馬可福音第十章，讓我們見到耶穌看著十字架等著 祂；而雅各和約翰看見寶座等著他們。而其他十位門徒看見什麼呢？他們看見雅各和約翰！他們惱怒、厭惡他們。為什麼？因為他們搶先到了耶穌那裡。他們明顯想要雅各和約翰一樣的東西，而他們惱怒因為他們兩搶先到。我們的憤怒也經常能這麼解釋，不是嗎？我們常常會因為別人先發制人、捷足先登而感到煩躁。
不過仔細觀察，耶穌把這些政治策略、操縱、要求特別待遇的態度全然撇開。這些是世界、社會的運作方式，可這些跟 神的國完全無關。在 神的國，也就是耶穌基督的教會，不需要為榮譽、地位而奮鬥。保羅在歌林多前書第十二章提到 基督的身子時解釋的非常好，這段論到由於我們有屬靈的恩賜、有主耶穌為我們開展的服事，還有天父授予的權力，我們不需要與任何人競爭。
這是我們的主想擺在祂的門徒面前的，因此把他們聚集在一起並耐心的說：“夥伴們，坐下吧；我有話想對你們說，你們把眼光注視在外邦人（那些不是屬 神的）。他們的治理方法總是操權管束別人；他們以手下人數來衡量權力，那是他們權威的標記”。現今還是如此，那是人們做事的方式、衡量成功的方式。而雖然會產生各式各樣的對抗、競爭、醜聞、政治謀權、心理戰術、使盡辦法擺弄所有的人，然而我們不可以責備人們，因為他們只懂得這些。
重點在這句話：“跟我不是這樣”。教會不應該建立為權力等级制度；在耶穌基督的教會裡沒有指揮系統。耶穌已經對門徒說過：“但你們不要受拉比的稱呼，因為只有一位是你們的夫子；你們都是弟兄。”（馬太福音廿三：8）。每一位使徒都小心翼翼的提醒我們壓迫別人的危險，還有當那些職權的人自以為有權利指使別人該做什麼或怎麼做、該想什麼或行為該如何，自認為有權利做出別人必須服從的決定，這些所帶來的問題；在教會不是這樣的。保羅謹慎的對哥林多人說：“我們並不是轄管你們的信心，乃是幫助你們的快樂，因為你們憑信才站立得住。”（哥林多後書一：24）。換句話說：“你可以為所欲為，在 神的面前，你得向祂而不是向我交代。＂可他也忠誠的指示他們所需要做的，還有告誡若不想這麼做會有的後果。可是在教會裡不應該有人命令別人做事；唯獨主能命令。
應用：這些耶穌教導的領導原則，如何裝備祂的門徒們反文化潮流的活著呢？一位真正的耶穌追隨者，能怎麼對抗政治與個人的爭權奪利呢？
Marcelo Morales 牧師
Autoritarismo vs. Servicio de amor
Marcos 10:32~52
“Así que Jesús los reunió a todos y les dijo: Ustedes saben que los gobernantes de este mundo tratan a su pueblo con prepotencia y los funcionarios hacen alarde de su autoridad frente a los súbditos. Pero entre ustedes será diferente. El que quiera ser líder entre ustedes deberá ser sirviente” (Marcos 10:42-43)
Al leer todos los versículos de Marcos 10 muestra a Jesús viendo a la cruz esperando por Él. Y Santiago y Juan ven tronos esperando por ellos. ¿Y qué ven los otros diez discípulos? ¡Ven a Santiago y Juan! Están enojados y disgustados con ellos. ¿Por qué? Porque llegaron primero a Jesús. Obviamente querían las mismas cosas que Santiago y Juan y estaban enojados porque ellos llegaron primero. Esta es a menudo la explicación de nuestra ira, ¿no? A menudo nos molestamos porque alguien pensó en este tema antes que nosotros.
Pero observe cómo Jesús deja a un lado todo este asunto de politizar y maniobrar y pedir privilegios especiales. Así es como funciona el mundo, pero no tiene nada que ver con el reino de Dios. En el reino y por ende en la iglesia de Jesucristo, no hay que luchar y luchar por la posición y el honor. Pablo lo explica tan bellamente en su desarrollo del cuerpo de Cristo en 1 Corintios 12, donde dice que debido a que tenemos dones dados por el Espíritu Santo y un ministerio abierto a nosotros por el Señor Jesús y el poder concedido a nosotros por El Padre celestial, no necesitamos estar en competencia con nadie.
Esto es lo que nuestro Señor quiere poner delante de Sus discípulos, así que los reúne y dice pacientemente: "Ahora, compañeros, siéntense, quiero decirles algo, ustedes tienen su mirada puesta en los gentiles (aquellos que no son de Dios). Ellos ejercen la autoridad, es siempre sobre alguien más, miden su poder por cuántos están debajo de ellos, esa es la marca de su autoridad". Todavía es cierto hoy en día. Esa es la forma en que la gente hace las cosas, la forma en que juzgan su éxito. Y aunque produce toda clase de rivalidad, competencia, escándalo, politiquería, maniobras, manipulación e intentar socavar a todos los demás, sin embargo, no se puede culpar a la gente por eso, porque eso es todo lo que saben.
La clave está en estas palabras: "No es así conmigo". La iglesia no debe ser establecida como una jerarquía de poder. No hay una cadena de mando en la iglesia de Jesucristo. Jesús ya había dicho a estos discípulos: "Pero ustedes, no permitan que nadie los llame “Rabí”, porque tienen un solo maestro y todos ustedes son hermanos por igual" (Mateo 23:8). Cada apóstol tiene cuidado de recordarnos el peligro de dominar a los demás y los problemas que surgen cuando aquellos en posiciones de autoridad piensan que tienen el derecho de decir a otros qué hacer o cómo actuar o qué pensar o cómo comportarse, creyendo que tienen el derecho de tomar decisiones que otros deben seguir. Esto no es cierto en la iglesia. Pablo tiene cuidado de decir a los corintios: "pero eso no significa que queramos dominarlos al decirles cómo poner en práctica su fe. Queremos trabajar junto con ustedes para que estén llenos de alegría, porque es por medio de su propia fe que se mantienen firmes" (2 Corintios 1:24). En otras palabras se diría así: "Puedes hacer lo que quieras, estas delante de Dios, responsable ante Él, no conmigo". Pero también es fiel para señalar qué es lo que necesitan hacer y para advertirles de los resultados que pueden seguir si no quieren hacerlo. Pero nadie debe ser mandado a hacer algo por otra persona en la iglesia. Sólo el Señor manda.
Algunas preguntas para la aplicación: ¿Cómo estos principios de liderazgo que Jesús enseña equipan a sus discípulos para vivir contra-culturalmente? ¿Cómo puede un verdadero seguidor de Jesús hacer frente a las luchas de poder político y personal?
Pr. Marcelo Morales
