上帝重立新約
耶利米書第卅一章
與神立約；亞伯蘭年九十九歲的時候、耶和華向他顯現、對他說、我是全能的神、你當在我面前作完全人，我就與你立約、使你的後裔極其繁多。(創17：1~２)
大部分的基督徒相信〝世界的敗壞與上帝的創造無關、與人的自由意志有關，因為上帝不會干涉人的自由意志〞，人的敗壞早在上帝的豫定中，人們因敗壞所帶來的悲傷、痛苦、絕望當然也不例外，立約雙方都有當盡的義務(對價)，如一般的買賣契約，一方交錢 一方交貨，伊甸之約與西乃之約皆是此性質之約背約時有罰則。
新約是永約，神與人所立之約皆為不平等條約，人何德何能，竟可與神立約，神卻願意委曲求全，乃是出於愛，因此，神人之約基本上對人而言，就是一種福份、恩典，不求回報的。
背約的結果:伊甸：死、被趕出、與神隔絕、勞苦、生產之苦、失去神同在及保護。
本章具體講述了神所應許的恢復，他想盡辦法要使百姓認識到，被擄並不意味著滅亡，而是走向美好的過程，強調神既然能夠恢復北以色列，也就能夠恢復南猶大，從而使瀕臨滅亡的南猶大重獲對恢復的盼望。神對北以色列必得恢復的應許，恢復的具體情況，歸還的應許，勸勉他們悔改，對南猶大必得恢復的應許，得到恢復北以色列和南猶大的新貌，神與以色列民族所立的新約等。
耶利米先知宣告說，使百姓紀念神過去的恩典，這是為了使被擄之人心存盼望，並且確信神必救贖他們，此新約預表了藉著十字架而成就之耶穌基督的血約，是神為了恢復悖逆的以色列而指出的主權性應許，神將來要與以色列全民立這新約；這約不象摩西的約，因為這約是無條件的；其條款包括，心的改變、與神相交、認識耶和華和、罪得赦免，主耶穌基督再來的時候，上述一切都要應驗。
盧光明牧師
Dios restablece el nuevo pacto
Jeremías 31
Abram tenía la edad de noventa y nueve años, cuando se le apareció Jehová y le dijo: “Yo soy el Dios Todopoderoso. Vive en mi presencia y sé intachable. Así confirmaré mi pacto contigo, y multiplicaré tu descendencia en gran manera.” (Génesis 17:1-2).
La mayoría de los cristianos creen que: “La corrupción del mundo no está relacionada con la creación de Dios, sino con el libre albedrío de las personas; pues Dios no interfiere en el libre accionar del hombre.” En verdad, la corrupción del hombre ya estaba prevista por Dios. De igual manera también lo estaban las consecuencias de la corrupción: el sufrimiento, la tristeza y la desesperanza. Existe una obligación para ambas partes en un pacto. Así como en un contrato comercial se intercambian dinero por mercancías, en el pacto de Edén y el pacto de Sinaí también hubieron derechos y obligaciones, desde las dos partes. El hecho de incumplir estos pactos traería consecuencias o castigos.
El nuevo pacto es un “pacto eterno”. Aunque este pacto entre Dios y el hombre es inequitativo. El hombre, en condiciones claramente inferiores, y vaya uno a saber con qué mérito o qué derecho, logra establecer un pacto con Dios. Dios humildemente ofrece este pacto por amor. Este pacto es una bendición, es por gracia, y no exige paga a cambio.
Los resultados de haber roto el pacto en Edén son: muerte, expulsión, aislamiento de Dios, sufrimiento en el trabajo, dolor para dar a luz, pérdida de la protección y compañía de Dios.
Este capítulo habla sobre la restauración en la promesa de Dios, e intenta dejar en claro que estar en cautiverio no implica exterminio, sino que es un maravilloso proceso. Si Dios pudo restablecer a Israel en el norte, también sería capaz de restaurar a Judá en el sur, y hasta desde la misma Judá, que estuvo al borde de la destrucción, podría levantar en medio de las cenizas una nueva esperanza.
La promesa de restauración que le dio Dios a Israel fue muy concreta. Era una promesa de retorno y una exhortación al arrepentimiento. Dios prometía también la restauración a Judá. A ambos, a Israel por el norte y a Judá en el sur, se les prometió que tendrían una nueva imagen: este es el nuevo pacto que hace Dios con los israelitas.
El profeta Jeremías proclamaba que el pueblo recordase siempre la gracia del Señor en el pasado, para que durante el cautiverio pudiesen encontrar esperanza y además tuvieran convicción de que serían rescatados. El Nuevo Testamento nos presentó el nuevo pacto mediante la sangre de Cristo en la cruz. Así se cumplía la soberana promesa de Dios para restaurar a la Israel desobediente. Dios quería establecer este nuevo pacto, de manera diferente al que se hizo con Moisés. El nuevo pacto es sin paga a cambio. Las condiciones en este pacto vigente son solamente: arrepentimiento del corazón, el conocimiento y relacionamiento con Dios, y el perdón de los pecados. Cuando el Señor Jesucristo regrese, él nos hará rendir cuentas de todo esto.
Pr. Alejandro Lu
