神的意念和人的意念
民數記第卅二章
在以色列人出埃及，經曠野，入迦南的歷程中，記載了很多因為不明白 神的心意、不相信 神的旨意和不遵守 神的律例的事蹟。此處的經文好像是這一類故事的變奏曲。 神的意念是要以色列的子孫一同去取得迦南為業，並住在那裏；雖然雅謝地和基列地也屬神所賜之地（民數記第三十二章3節）但其位置是在約但河的東邊，尚未進入迦南地。
在即將進入迦南地的緊要關頭時，流便和迦得兩個支派出人意外地要求想留在約但河東。這件事使摩西因他們的請求感到非常不平安，讓他認為這就如同當年十個探子因不信而不願進迦南的罪惡再次的重演，很怕 神對上一代以色列人的懲罰再次臨到百姓而滅亡。在摩西和兩支派充分表達雙方意見之後，這兩支派還是很喜愛這塊地，所以向摩西提出一個合情合理的計畫。所謂的變奏曲是指在此處這兩個支派所提折衷的建議：他們願意放棄將來在迦南地的業權；只希望先重建城牆及羊圈，使婦人、孩童與牲畜有安身之地；然後他們的男丁願意參與戰爭，且願站在前線，直到以色列其他支派定居迦南地為止。摩西最後｢尊重民意｣而接受他們的協商，雙方達成共識。後來他們真的實踐了這承諾（約書亞記第四章12節和第廿二章1到2節）。
但是，如果加以認真思考此事，有幾點覺得可惜的地方：第一， 神的命令很清楚而他們卻沒有直接遵守；第二，兩支派有自私的動機，隨著目前的利益，單憑眼見而安於現狀，甚至放棄進入迦南地的使命；第三，摩西以往都會求告 神，在這次卻只記載和他們的協議，沒有提到尋求 神就和他們簽約分地了。
經過歷史的證明，我們看到在約但河東邊的土地雖然很美，但是缺少地理屏障的保護，很容易被人侵略。此地的兩個支派和瑪拿西半個支派在以色列尚未亡國前，就被亞述攻入，最先遭到被擄的命運(列王記下的十五章29節)。很可惜，優先次序顛倒了，應先要在合神的心意下再來迎合人意；先要在 神作主的前提下再來談民主和協商才是正確的程序。以賽亞書第五十五章8到9節「耶和華說：我的意念非同你們的意念，我的道路非同你們的道路。天怎樣高過地，照樣，我的道路高過你們的道路，我的意念高過你們的意念。」我們要清楚，神的意念是賜福的意念，祂的旨意裡面有著美好的意思，即使現在我們眼睛看不清楚，我們的頭腦想不明白。「耶和華說：我知道我向你們所懷的意念，是賜平安的意念，不是降災禍的意念，要叫你們末後有指望。」(耶利米書的二十九章11節)。
林見興長老
La voluntad de Dios y la voluntad de hombre
Números 32
Desde la salida de los israelitas de Egipto, la transición en el desierto y la entrada a la tierra de Canaán hemos podido observar como en numerosas oportunidades no supieron comprender la voluntad de Dios, no confiaron en Su designio y no obedecieron Sus estatutos. El pasaje de hoy pareciera una variación musical de la típica historia de los israelitas. La Voluntad de Dios era que los descendientes de los israelitas tomaran en posesión la tierra de Canaán y echaran raíces ahí. Si bien Jazer y Galaad también pertenecen a la tierra prometida por Dios (Números 32: 3), pero se encuentran ubicados al Este del río Jordán, en las afueras de Canaán.
En el momento decisivo de entrar a la tierra prometida, las tribus de Rubén y Gad por voluntad de hombre pidieron quedarse al Este del río Jordán. Este asunto incomodó a Moisés y estuvo intranquilo, le pareció volver a revivir la escena del pasado en donde el pecado por la incredulidad de los 10 espías no les permitió entrar a la tierra de Canaán. Temía que el castigo que Jehová había impuesto sobre los israelitas de la generación anterior se volviera a impartir sobre el pueblo y murieran. Luego que Moisés y las dos tribus expresaran fuertemente sus puntos de vista, Rubén y Gad aún manifestaban que preferían las tierras que pretendían, por lo tanto, le ofrecieron a Moisés una propuesta acorde a la situación. La variación musical se refleja en la propuesta mediadora de estas dos tribus: Ellos estaban dispuestos a declinar sus derechos a la heredad por tierras en Canaán; sólo deseaban volver a levantar muros para sus ciudades para sus mujeres y niños y reconstruir los corrales para sus ganados. Los hombres de sus tribus estaban dispuestos seguir participando de las guerras e incluso ser puestos al frente en toda batalla hasta el día en que el resto de las tribus de Israel tomara posesión sobre Canaán. Hacia el final, Moisés “respeto la voluntad del pueblo” aceptando la propuesta y ambas partes llegaron a un consenso. De hecho, en efecto, Rubén y Gad cumplieron sus promesas. (Josué 4: 12, 22:1-2)
Sin embargo, en un análisis más profundo, hay varios puntos que nos llama reflexionar: el primero, no obedecieron una orden clara y directa de parte de Dios. En segundo lugar, estas dos tribus tuvieron motivaciones egoístas, sólo vieron el beneficio inmediato, el status quo y desecharon la comisión de entrar a Canaán. En tercer lugar, en el pasado Moisés solía consultar siempre con Dios, sin embargo, en esta oportunidad, sólo se describe que llegó a un acuerdo con las partes, no se menciona que buscó la voluntad de Dios antes de confirmar la división de tierras.
La historia comprueba que a pesar de que el terreno al Este del Jordán era muy fértil, no contaba con la protección natural de la barrera geográfica y por lo tanto, se encontraba más vulnerable a invasiones. De hecho, tanto Rubén, Gad como media tribu de Manasés fueron invadidos por los Asirios y puestos en cautiverio mucho antes de el resto de Israel (2 Reyes 15: 29) Fue una pena que tuvieran las prioridades invertidas, primero deberían estar bajo la voluntad de Dios antes de llegar a un acuerdo con los hombres; el procedimiento correcto sería que Dios enseñoreara sobre nuestras decisiones antes de sucumbir ante una resolución por mayoría. Isaías 55: 8-9 dice “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.” Debemos tener en claro que la voluntad de Dios es una de bendición, su designio conlleva un maravilloso propósito aunque nuestros ojos no lo puedan ver con claridad o nuestra mente aún no pueda entender. “Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor —, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.” Jeremías 29: 11
Presb. Timoteo Lin
