2016年9月18日 星期日

阿根廷教會每日靈修 - Devocional del Dia



社會公義的維護

出埃及記第廿一章

 

以眼還眼、以牙還牙的觀念是出自舊約出埃及記第廿一章,耶和華曾曉喻摩西需以此懲治原則,豎立嚇阻不良動機的執法概念。

新約時期,耶穌曾引用過「以眼還眼」這句話,看似反對懲治罪犯,亦被誤解為只講愛的耶穌、寬恕眾罪的主不再主張社會公義。

其實,當耶穌說:「你們聽見有話說:『以眼還眼,以牙還牙』只是我告訴你們,不要與惡人做對,...」(太五38,39)的意思是:
  1. 要門徒懂得「識時務者為俊傑」,不要以雞蛋碰石頭,反倒讓自己陷入更大的逼迫與痛苦。
  2. 儘管之後強調要「愛你們的仇敵,為那逼迫你們的禱告。」(太五44),卻是指敬畏 神的個人亦需要學習寬恕,但不意味著社會可以沒有制裁罪犯的公義!

神的愛與公義並存,信徒都當學習寬恕、不怨恨仇敵。但地上的政府有責任維護人民的安全,並代表 神施行公義的審判與刑罰。如果耶穌只講愛不講公義,也就不需要 神成為人,來到世上走一遭受苦的十架之路了!

近幾十年來,全世界的犯罪率有增無減,只因為人權主義的潮流高脹,殘害人的罪犯跟被殘害者一樣,都享有基本人權與自由。甚至連許多國家都早已廢除死刑,對於殘酷無比的殺人罪犯最多只判無期徒刑,無需付出對等的代價,只需在獄中服刑幾十年後,因表現良好即便視為改邪歸正,給予寬容,假釋出獄,恢復自由。試問,如此社會的公義在哪裡?個人當然不能用自己的手行公義的審判,但當制訂國家的刑法時,國會應該堅定地站在保護人民的立場,而不是更多為罪犯的「人權」、「安全及生命」設想。國家需重視的是如何遏止犯罪的可能性,保護更多善良的公民。可悲的是,現今鼓勵不要以惡報惡的普世價值的努力推廣之下,不公義的社會激發更多惡人以身試法的犯罪膽量。

法律應是為維護和平、保護好人而設立的。個人可以因基督信仰而饒恕那傷害他的人、愛仇敵,卻不應該以「人權」以「寬恕」為由,要求國家廢除死刑,要求社會廢除重罰,不應該忽視嚴刑峻法的意義與功用。畢竟,出埃及後的治安,也是因為「以命償命、以牙還牙、以手還手、以腳還腳、以烙還烙、以傷還傷、以打還打」進而奠定一穩固社會公義的基礎。


何仁豪牧師
 

 

El mantenimiento de la justicia social

Éxodo 21

“Ojo por ojo, diente por diente” es un concepto proveniente de Éxodo capítulo 20 del Antiguo Testamento, en donde el Señor le indica a Moisés que se debería impartir justicia de esta manera para disuadir a los criminales.

En el Nuevo Testamento, Jesús habla sobre el principio del "ojo por ojo", y en su exposición, aparentemente estaría opuesto a castigar a los delincuentes. Se ha llegado a malinterpretar así, que Jesús solamente nos enseña a perdonar toda ofensa y no fuera defensor de la justicia y el orden.

En realidad, cuando Jesús dijo: "Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo les digo: No resistan al que les haga mal." (Mateo 5:38-39) su intención más bien era:
  1. Que los discípulos debieran ser inteligentes y discernir aquellas situaciones donde no fueran capaces de vencer a un agresor más fuerte, para evitar chocar con aquél y pasar por mayor sufrimiento.
  2. A pesar de que Jesús diría después "Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen." (Mateo 5:44) , Él se refería a que las personas que temen a Dios también necesitan aprender a perdonar. ¡Pero eso no significa que una sociedad pueda estar sin sanciones para los transgresores, y sin justicia ni orden!

El amor y la justicia de Dios coexisten. Los cristianos debemos aprender a perdonar, y no odiar al enemigo. Sin embargo, los gobiernos tienen la responsabilidad de mantener la seguridad en la tierra, y en nombre de Dios impartir justicia y castigo. Si Jesús hablara solamente de amor y no de justicia, ¡no habría necesidad de que Dios se haya hecho hombre, viniera al mundo, y muriera en la cruz!

En las últimas décadas, la tasa de criminalidad ha sido cada vez mayor en el mundo. Los defensores de los derechos humanos están en boga y por eso, tanto víctimas como agresores gozan de derechos humanos y libertades básicas. Incluso muchos países han abolido la pena de muerte para los criminales homicidas, sujetos sumamente crueles que han sido condenados como máximo a cadena perpetua y no tienen que pagar el precio de sus actos. Éstos simplemente cumplen su condena en la cárcel, y por buen comportamiento, o incluso si expresan arrepentimiento, pueden ser excarcelados bajo libertad condicional, y restaurar así su libertad.

Me pregunto: ¿dónde está la justicia en una sociedad así? Por supuesto una persona no debe impartir justicia por mano propia, pero la legislación penal debería hacer más para proteger la seguridad de la gente, en lugar de priorizar los "derechos humanos" de los criminales. El país necesita poner mayor foco en cómo prevenir actos criminales para proteger a los buenos ciudadanos. Lamentablemente, ante la postura corriente de NO aplicar el “ojo por ojo”, se ha estimulado más que nunca a que los malhechores tengan suficiente coraje de desafiar las leyes.

La ley debe servir para mantener de la paz y proteger a los ciudadanos de buena conducta. Las personas a través de sus convicciones y su fe pueden perdonar a aquellos que los lastimaron, amando a sus enemigos. Pero jamás debiéramos por "derechos humanos" o por "misericordia" llevar adelante la abolición de la pena de muerte, ni pasar por alto la función disuasiva de las leyes duras. Después de todo, la ley y el orden al salir de Egipto, basado en "vida por vida, diente por diente, mano por mano, pie por pie, la quema por quema, herida por herida” fue clave para establecer una sólida base de justicia social.

Pr. Felipe Ho