悔改與拯救
以賽亞書第六十四章
求 神大能拯救的呼聲，理應源自於一顆悔改的心。
除了以賽亞書卅章15節提到的：「得救在乎歸回安息」之外，得救更應該起始於一個認真嚴肅的悔改歸正的態度，倘若「人不肯承認自己的敗壞、確實知道自己遠離了 神，生命絲毫沒有盼望」；倘若「人沒有認識到 神的信實、慈愛、聖潔與偉大對自己是何等重要，不肯皈依信靠真理的 神」；又倘若「人沒有意識到自己與 神之間原本應有的關係，與蒙恩得救之後所恢復的關係是何等有福！」人如何能從罪惡和禍患中得著拯救呢？到底得救是在乎環境還是在乎心境呢？是在乎表象還是在乎態度呢？是在乎肉體的力量或是在乎向 神認罪呼求的聲音呢？如果人懂得回轉歸向真理、慈愛的 神，神必不輕忽他悔悟的禱告，必要「裂天而降」，必要「行人所不能逆料、可畏之事」（1～3）因 神必為等候祂的人行恩典慈愛之事（4）。
以賽亞先知在此特別指出，不管人自己覺得自己有多好、多善良、多公義、多正直，只要離了 神，人的義，人的善充其量只不過好像是污穢的衣服，或像漸漸枯乾的葉子一般，喪失了生命的榮美、盡失了存在的意義。所以，藉由悔改，人與 神之間的關係得以再次恢復，神必救拔困境中的人，讓他重新體驗 神掌權的美好，宛如穿上潔白新衣、宛如枝芽茂盛，再得生命滋潤！
最好我們都常保敬畏、聖潔、永不離開 神，但若我們在世界裡迷失了，也嚐到罪所帶來的苦果，切勿堅持走離棄 神的道路，只要回轉，承認己罪，神是信實的，必要赦免我們的罪，洗淨我們一切的不義（約壹一9），並除了祂以外別無拯救（徒四12）。
何仁豪牧師
Arrepentimiento y salvación
Isaías 64
Aquél clamor que invoca la salvación del Dios todopoderoso, en principio nace desde un corazón arrepentido.
Adicionalmente a que “en el arrepentimiento y la calma están la salvación” (según se menciona en Isaías 30:15), también la salvación tiene que comenzar con una actitud seria de arrepentimiento y cambio de conducta. Si el hombre reconoce que se ha alejado de Dios, pero no admite su maldad, y no tiene esperanza de vida; si el hombre entiende lo fiel, amoroso, santo y grande que es Dios, y lo muy importante que es para su vida, pero si no cree y confía en el Dios verdadero; si ese hombre no comprende la relación que debería haber entre Dios y sí mismo, y la gran bendición que le espera cuando sea salvo y restaure esa relación, ¿cómo ese hombre podría ser salvo del medio del pecado y la calamidad? ¿Acaso la salvación tiene que ver con nuestro entorno o con nuestro corazón? ¿Importan más las apariencias o la actitud? ¿Depende más de nuestras fuerzas físicas o de nuestro clamor pidiéndole perdón a Dios? Si tan solo las personas comprendieran que con volver al Dios de verdad y amor, harían que Dios oyeran sus oraciones de arrepentimiento, que “se abrirían los cielos y Él descendería”, y que podría desplegar las obras más “inesperadas” (Is. 64:1-3), porque Dios realiza obras de gracia y amor sobre los hombres que le esperan…
El profeta Isaías ha señalado enfáticamente que sin importar lo muy justo, bondadoso, correcto o decente que nos consideremos a sí mismos, el solo hecho de alejarnos de Dios, harían que nuestra propia justicia y bondad fueran no más que prendas de vestir llenas de mugre, u hojas que se marchitan; y que habríamos perdido cualquier vestigio de gloria y significado de la vida. Por eso, a través del arrepentimiento, la relación entre nosotros y Dios puede ser restaurada. Dios levantará a los que están en medio de adversidades, para que vuelvan a experimentar lo bueno que es estar bajo su amparo. ¡Es como ponerse prendas de vestir blancas y nuevas, volver a florecer y ser nutridos profundamente!
Nada mejor que siempre mantenernos con temor y en santidad, y jamás alejarnos de Él. Si nos encontramos perdidos en el mundo, o si estamos saboreando las consecuencias amargas del pecado, jamás insistamos en continuar en ese camino a contramano de Dios. Con solo pegar la vuelta y confesar nuestros pecados, nuestro Dios fiel indefectiblemente perdona nuestros pecados y lava todas nuestras maldades (1 Juan 1:9). De hecho, en ningún otro lugar hay salvación (Hechos 4:12).
Pr. Felipe Ho
